Para todos es sabido que el agua es un nutriente fundamental en cualquier organismo, especialmente en los animales, de ahí la importancia de ésta para la producción animal.
El control del agua en las explotaciones animales es fundamental pues puede transmitir, entre otros, microorganismos patógenos. Por ello, el agua bebida por los animales debe ser agua limpia, con una calidad bacteriológica y físico-química adecuada, es decir, exenta de malos olores, sabores extraños e incoloros, sin materia orgánica ni sustancias químicas de síntesis y sin bacterias.
Por ello, el nivel de calidad del agua utilizada en las explotaciones ganaderas ha de cumplir unos requisitos mínimos que aseguren la calidad del agua y eviten cualquier riesgo por mínimo que sea para la Seguridad Alimentaria.
En G&G Agropecuarios le animamos a que nos consulte sobre la higienización de aguas en su explotación ganadera, le asesoraremos de la mejor forma posible sin compromiso alguno.
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